El consejero de Salud, Pablo Fernández, acaba de anunciar tras participar en la sesión extraordinaria urgente del pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, que el Gobierno del Principado hará mañana público un documento en el que se pedirá a la población, encarecidamente, que se confine en sus domicilios y que salga a la calle para aquellas cuestiones que tienen relación con lo laboral, la enseñanza o la adquisición de productos básicos.
Además, el consejero anunció que se establecerán unas franjas horarias para que las personas más vulnerables «puedan moverse, hacer paseos o algo de ejercicio con el fin de evitar los efectos secundarios que, sabemos, tiene el propio confinamiento domiciliario».