El Gobierno de Asturias permitirá la apertura del pequeño comercio a partir del miércoles, 25 de noviembre, tras el acuerdo adoptado por el comité de crisis de la covid-19 al constatar un descenso en la incidencia de la pandemia. El jefe del Ejecutivo autonómico, Adrián Barbón, que ha presidido de forma telemática la reunión de este órgano, ha asegurado que “la situación sigue siendo crítica, pero mejor que hace una semana”. La mejoría se evidencia en la disminución del número de contagios, que ha pasado de una media de 505 casos positivos diarios a los 330 en los registrados en los últimos siete días.
Para el presidente, estos datos avalan las recomendaciones de los epidemiólogos, que incidían en que “sólo adoptando medidas drásticas y contundentes” se podría contener la expansión del virus y que sus resultados comenzarían a notarse “entre quince y veintiún días después”. “Estas actuaciones, que eran y son dolorosas, están suponiendo un cortafuegos de la extensión para el coronavirus”, ha añadido.
El Principado permitirá la apertura del pequeño comercio, aquel que no supera los 300 metros cuadrados de superficie, bajo un riguroso cumplimiento de las medidas de seguridad y un estricto control de aforos. Esta flexibilización también incluirá la incorporación, a los mercadillos al aire libre, de todos los productos que ahora mismo no se consideran esenciales y cuya venta, por tanto, no está permitida. “Una apertura pequeña y gradual que debemos hacer compatible con el objetivo de seguir reduciendo la incidencia acumulada del virus”, ha agregado el presidente.