spot_img

‘Nacida sombra’, este viernes en el Palacio Valdés

El Teatro Palacio Valdés acoge este viernes 31 de mayo, a partir de las 20.15 horas, el espectáculo de danza ‘Nacida sombra‘, dirigido por la bailaora y coreógrafa Rafaela Carrasco a partir de un texto del actor y director Álvaro Tato. La danza flamenca y la española se dan la mano en una obra que rinde tributo a las grandes artistas españolas que consiguieron hacerse escuchar en el Siglo de Oro. Teresa de Jesús, María de Zayas, María Calderón y Sor Juana Inés de la Cruz son las figuras en torno a las cuales gira la obra. Tres escritoras y una actriz que vuelven a la vida en escena, unidas a través del baile, de la música, de la palabra, de la voz que les da ‘Nacida sombra’.

Este espectáculo forma parte del ciclo de abril a junio de escenAvilés, dentro del programa estatal de artes escénicas Platea. Las entradas se pueden adquirir a precios que van desde los 15 hasta los 25 y 28 euros, en función de la zona del teatro. Se encuentran disponibles en los cauces habituales: las taquillas de la Casa de Cultura, la taquilla del Teatro el día de la resceescenaepresentación desde dos horas antes, los cajeros de Liberbank, el teléfono 902 106 601 y la web https://entradas.liberbank.es/palaciovaldes.

Rafaela Carrasco dirige e hila con el baile la idea original del dramaturgo, actor y director Álvaro Tato

La bailaora y coreógrafa Rafaela Carrasco dirige e hila con el baile la idea original del dramaturgo, actor y director Álvaro Tato. Un encuentro entre el flamenco y las grandes creadoras protagonistas. Hablan a través de cuatro cartas imaginarias escritas en distintos tiempo y lugares, y cobran vida en la voz de Blanca Portillo, y que Carrasco y sus tres compañeras en escena, Florencia O’Ryan, Blanca Lorente y Paula Comitre hilvanan con maestría.

En el escenario, surge poderosa la voz en off de Blanca Portillo, una Teresa de Jesús que anuncia lo que llegará sobre las tablas: “Hijas queridas, mujeres futuras, qué me queréis. A qué venís. En la soledad de mi celda, cuando anochece, puedo escuchar vuestra voz dentro de mí, como si recordara los años venideros, como si me escribierais cartas desde el porvenir. Quiénes seréis, os perseguirán también o viviréis libres, os criarán sin la luz del saber, sin derecho a la voz, como a toda mujer, viviendo en tinieblas, nacidas sombra. Hijas queridas, esta noche vuestra Teresa os sueña”.

La voz de la actriz madrileña supura las dichas y desdichas de unas mujeres a contracorriente de su tiempo; las cuatro bailaoras las vuelven corpóreas, las revisten de vida. Y las cinco, en una conjunción perfecta, consiguen una expresividad única, todo el sentimiento, por seguirillas, por solares, por bulerías, por alegrías, fundidas con la explosión armónica barroca: palabra, música, baile.

Los espectadores viajan y se sumergen en un pasado a veces tan presente

En un ciclo lunar surgen Teresa de Jesús, quien sueña a las demás. Ella es la luna nueva, “la ausencia de reflejo, la constancia de un vacío que se llena con el espíritu del que lee, del que mira o siente”. María de Zayas es la luna creciente, “guerrera, pujante”, transgresora, beligerante y telúrica. María Calderón, “La Calderona”, es la luna menguante, seductora, “un velo desdibuja su figura”. Y finalmente Juana Inés de la Cruz, la luna llena, “pletórica, deslumbrante, en la noche estrellada del barroco”.

El arte trasciende con el cante de Antonio Campos y Miguel Ortega, con las guitarras de Jesús Torres y Juan Antonio Suárez Cano. Cuatro músicos de reconocido prestigio y larga trayectoria. Es flamenco, y es raíz, es tierra universal, es cuerpo.

El talento se desborda en la creación de Rafaela Carrasco, sobre una escenografía austera de Carolina González, iluminada por Gloria Montesinos. Los espectadores viajan y se sumergen en un pasado a veces tan presente, y han sido cautivados por toda España y Francia. La crítica también ha sido unánime en el reconocimiento de la propuesta y del trabajo de todos los implicados.

spot_img

Lo + leído

Artículos relacionados